Nuestra aventura en Ayatur la recordaremos para siempre. El espacio es un paraiso, todo esta cuidado hasta el último detalle. La zona comunitaria es muy familiar y las habitaciones estan muy bien equipadas (toallas, jabón) y muy limipas. Nos hemos sentido parte de la familia y de bien seguro que regresaremos pronto! Muchas gracias por todo! Abrazos!.

Ha sido increíble. El alojamiento es espectacular en medio de la selva, y dispone de todas las comodidades. la habitación es muy confortable estando bien cerrada para que no entre ningún bichito. Estefita nos ha tratado como si estuviésemos en nuestra casa , cocinando súper bien para nosotros y preocupándose porque estuviésemos contentos. ToManueladas las actividades maravillosos.

No sé por dónde empezar. Empezó con la coordinación súper confiable con Hernán. Siempre estuvo disponible antes de que yo llegara al albergue y respondió a todas mis preguntas con prontitud y rapidez. Cuando llegué a Iquitos no tuve que esperar. Ya estaban de pie en la sala de llegadas para recibirme, lo cual es realmente genial para una mujer que viaja sola.

Soy Chilena y viaje sola, entenderán que el Amazonas e internarse en la selva no es tan simple como ir a una ciudad sola. Pero debo agradecer infinitamente a Hernan y su equipo de Ayatur.
Estuve en el lodge durante la segunda semana de abril, afortunadamente fui la única pasajera en el lugar, por lo que los tour y todas las actividades fueron personalizadas y acomodadas a mis gustos.

Ayatur Lodge fue una gran experiencia en medio de la Selva Amazónica. Hernán nos recogió en Iquitos y nos acompañó en bote hasta el albergue. El albergue se encuentra a unos 35 km río arriba, cerca de las casas de la familia y la comunidad de Hernán. Éramos los únicos huéspedes. El edificio en el que duermen todos los huéspedes estaba muy limpio y tenía hamacas para relajarse por la tarde. Las camas eran cómodas. El personal fue realmente encantador. 

El lugar está al interior del Amazonas, alejado del ruido de la ciudad. Una linda experiencia para realmente desconectarse de la vida urbana y conectarse con la naturaleza.
Me sentí muy segura, las instalaciones están pensadas en quienes no acostumbramos vivir en un lugar tan apartado, muy buenas las protecciones para los mosquitos. Todo el equipo también fue muy atento y amable. Volvería encantada!